Así fue que la idea, una semilla en mi mente, floreció para que el 20 de julio del 2000, con solo $100 dólares y mucha determinación, me aventurara a llegar a Estados Unidos en busca de mi gran sueño.
Fue una travesía de ocho meses hacia la libertad:
Vendí tortillas, elotes, trabajé transportando personas en triciclos, hasta que de tanto en tanto, logré atravesar el río Bravo; estuve tres días en el desierto, padeciendo las inclemencias del árido terreno, la falta de agua y de comida, viendo las personas desistir de sus sueños. Mi mente y espíritu estaban enfocadas en el deseo ardiente de ver a mis padres recibir la casa que con tanto amor les prometí construír.
Mi historia comienza en un humilde rancho de Honduras, donde siendo un niño aprendí a trabajar largas horas en el campo para ayudar en el sustento de mi familia.
Crecí entre caminos de tierra y lodo…
Que me conducían a la escuela, donde mi mente me invitaba a pensar en todas esas cosas que escuchaba de los mayores: Que la vida era muy distinta en América, que cuando uno llega a los 18 años podría viajar a los Estados Unidos y lograr el sueño Americano de ser rico y un sinnúmero más. Este pensamiento ha movilizado millones de personas al llamado país de las oportunidades.
Llegué a Estados Unidos el 15 de marzo de 2001 y mi primer trabajo fue en un restaurante al que le dedicaba doce horas al día, seis días a la semana. Vivía en una casa de extranjeros con mis primos que trabajaban en el mismo lugar, y que como un espejo de la realidad del inmigrante en Estados Unidos, estaban quebrados y, con el poco dinero que les quedaba, ahorraban con la esperanza de adquirir riqueza y libertad financiera, pero la cruda verdad les mostraría que no estaban en lo cierto.
Pero, mi vida cambió el día que me invitaron a una presentación de negocios de Network marketing. A pensar de estar muy excéptico, me abrí a la posibilidad de que si alguien lo había hecho en 10 años, yo me iba a dar esos 10 años y me volvía millonario o me moría intentándolo.
Gracias a toda la información que empezaron a compartirme…
De desarrollo personal, descubrí el libro “Piense y Hágase Rico” de Napoleón Hill, donde comencé a estudiar y a aplicar los principios de riqueza que allí se encuentran. Desarrollé mis propósito claro en la vida y me puse una meta de ganar 120 mil dólares al año, y sin importar cualquier cosa, no iba a descansar hasta lograrlo.
Me enfocaba todos los días en seguir los 6 pasos del éxito (que son parte de lo que enseño en mis seminarios y entrenamientos) y trabajaba enfocado en la persona en la que me quería convertir.
Y como lo decía el libro: Cuando terminé el siguiente año, superé la cifra planteada, cambiando por completo mi vida y la de mi familia.
En los últimos 10 años…
He desarrollado una red de más de 400 mil personas y he movido más de 500 millones de dólares en mi organización.
Además, he podido generar empleos, apoyar proyectos e ideas de negocios que solo requieren de la voluntad de una persona capaz de aportar valor para los demás.
SIN EMBARGO…
Cuando alcanzas la libertad financiera y ayudas a otros a lograr su propia libertad, entiendes que hay algo más allá.
Fue justo en ese momento en el que descubrí que tenía un llamado: Compartir los principios y las leyes que me han permitido lograr todos mis sueños y tener la vida que tanto había proyectado.
Estoy convencido de que a través de la educación de calidad y el vehículo correcto para las personas, podremos transformar la vida de 1 millón de personas en nuestros países latinoamericanos, enseñándoles a cómo ganar dinero, cómo administrarlo y aumentar ese dinero día a día.
Así estamos convirtiendo lo que se conoce como El Sueño Americano en EL SUEÑO LATINO.
Este camino recién comienza…
Si tú eres una persona apasionada, emprendedora y con espíritu de liderazgo…
Si tú crees en el poder de los sueños y en que todo lo que puedes creer lo puedes crear en tu realidad…
Si tú estás buscando cómo convertirte en un ejemplo de superación y construir la vida de tus sueños para ti y tu familia…
Dale clic al botón y te mostraré cómo estoy ayudando a personas a cambiar su realidad financiera y construyendo juntos la abundancia, prosperidad y riqueza que nos merecemos los latinos.
¡Te espero!